It (Eso), Stephen King

"En aquellos momentos interminables, mientras buscaba a tientas la llave de la luz con la mano derecha (el brazo izquierdo se cogía con fuerza a la jamba de la puerta), el olor a sótano parecía intensificarse hasta llenar el mundo entero. Los olores a suciedad, humedad y hortalizas podridas se mezclaban en un olor inconfundible e ineludible; el del monstruo, la apoteosis de todos los monstruos. Era el olor de algo que él no sabía nombrar; el olor de Eso agazapado al acecho y listo para saltar. Una criatura capaz de comer cualquier cosa, pero especialmente hambrienta de carne de niño ". It (Eso). Hay libros cuya extensión pueden provocar cierto vértigo en el lector a la hora de emprender su lectura. Hay gente que lo compara con atravesar un océano inmenso o subir uno de los imponentes ochomiles. El mismísimo Quijote es lectura complicada para mucha gente, sumando a su extensión la dificultad del castellano antiguo. Cosa que en mi caso no ocurre, pues cada vez que lo releo es ...