Pequeña historia mítica de España, David Hernández de la Fuente

"Desde la Edad Antigua, la vieja "piel de toro", retomando al animal simbólico más perdurable de la península Ibérica, ha estado transitada por crónicas legendarias que corrían a la par de la historia oficial y evenemencial, la de la política y las formas de gobierno, la sociedad, los gobernadores, las legislaciones, los conflictos bélicos, la evolución de la economía y sus modelos. Era esta una historia subterránea, algo más tangible, pero no menos verdadera ni, desde luego, influyente, que refería el desarrollo de una manera de estar en el mundo bastante peculiar. Estos mitos aludían a una especial forma de ser europeo y occidental que se conformaba en la mentalidad hispánica, de forma acaso algo exagerada y siempre en los extremos. Los mitos historiados que se han evocado aquí hablan de héroes y heroínas, reyes justos y tiranos, traidores de leyenda, personajes semidivinos, criaturas híbridas y montaraces, y un sinfín de arquetipos y lugares comunes que recorren la geografía legendaria de una España situada en los extremos del mundo conocido, a veces en paisajes yermos y otros vergeles exuberantes". Pequeña historia mítica de España.



En este blog hemos visto distintos libros que han tratado la historia de España desde distintos puntos de vista. Empezando con el repaso a siglos de historia escrito por Eslava Galán, a episodios más concretos, con episodios tan lejanos como la Reconquista o La Conquista tambien escritos por don Juan. Hasta pasar a algunos más cercanos como la Guerra Civil, magistralmente condensada por Paul Preston, o el Franquismo y la Transición, también de Eslava Galán. Pero esta vez, el libro a reseñar presenta un recorrido historico español, no centrándose en episodios, personajes, periodos o acontecimientos en concreto. Si no aqui, el escritor y profesor universitario David Hernández de la Fuente repasa de una manera maravillosa un aspecto poco conocido o explorado por la historiografía general: el mito en la historia de España. Y escribe un librito delicioso que se lee en un suspiro, donde analiza concienzudamente aquellos mitos que han configurado la historia de esta nuestra piel de toro, tan querida como denostada. Con mucho gusto os presento: Pequeña historia mítica de España de David Hernández de la Fuente.

El autor antes de hablarnos de los mitos que configuraron la historia española desde tiempos inmemoriales, nos aclara qué es un mito. Los mitos eran historias que venían a explicar el mundo en el que vivían los antiguos. De carácter oral y ancestral, las distintas culturas antiguas se valían de ellos para crear una historia propia y una manera de entender los fenómenos que escapaban a sus entendimientos. Griegos, egipcios, mesopotámicos, árabes, persas, aztecas elaboraron una serie de mitos propios que sentaban las bases de su propia historia, cultura, folklore e idiosincrasia. 

Los habitantes del pedazo de tierra que los romanos llamaron Hispania, los griegos Iberia y los árabes Al-Ándalus, no fueron ajenos al mito. Tartessos, cartagineses, iberos, celtas, configuraron varios mitos que han permeado durante siglos creando una historia mítica propia. También nos habla como los mitos clásicos, es decir griegos y romanos, cuna de la cultura y civilización europea, bíblicos y centroeuropeos, también se mezclaron con los autóctonos hispanos, siendo estos una especie de mito fundacional de muchas culturas, dada su importancia en el bagaje cultural humano.

El libro se divide en varios capítulos, ordenados cronológicamente donde analiza varios mitos centrándose en una galería de tipos y arquetipos españoles. 

El primero nos habla de la geografía legendaria ibérica. Nuestro país era conocido por los antiguos como finis terrae osea el fin del mundo conocido. Las costas gallegas eran el último punto conocido por los navegantes, quienes consideraban que allí se encontraba la frontera con lo desconocido, el fin de todo. En la antigüedad también se consideraba un territorio mítico, un vergel paradisíaco, lugar de paso de héroes en busca de aventuras. Montes sacros, bosques frondosos, tierras yermas y baldías, las Islas Afortunadas, incluso la Antártida, fueron los mitos que explicaban aquella mítica España. 

El primero personaje relevante que se presenta es el poderoso Hércules, Heracles para los griegos. El gran semidiós llegó al fin del mundo para realizar algunos de sus trabajos. Se cree que aquí llego para robar los rebaños de un rey mítico llamado Gerión, en algunos mitos es un gigante descomunal de tres cuerpos y que llegará para robar las manzanas del jardín de las Hespérides. También se cree que al ser el final del mundo se encontraban allí las puertas del inframundo, por lo que allí fue Hércules para traer el Cancerbero. Pero el mito principal que une al musculoso semidiós con España, es que con su extraordinaria fuerza dividió dos montes creando lo que hoy es el estrecho de Gibraltar. Tal fue la simbología de este suceso que los montes fueron nombrados como columnas y estás formaron a ser un símbolo patrio, incorporándolo al escudo nacional. 

Hércules separando los montes, por Zurbarán.

Junto al forzudo héroe, el autor repasa algunos arquetipos de aquella España semi legendaria, con ese mezcla de pueblos aguerridos y místicos. Todos esos mitos acaban llegando hasta las primeras incursiones romanas donde los celtíberos plantaron cara a las legiones, con los lusitanos liderados por su legendario caudillo Viriato, traicionados por los suyos, o los hermanos Indíbil y Mandonio. También aún resuenan la historia de la resistencia de Numancia, quienes prefirieron morir a ser esclavos de Roma, representan el carácter indómito e irreductible de los pueblos originarios de la península ibérica frente al invasor romano.

Viriato, mito de resistencia ante el opresor. 

Con la total conquista por el ejército romano del territorio al que llamaron Hispania, el siguiente capítulo de centra ya en la Hispania romana, cuna de algunos de los hombres más célebres del imperio. No por ello los más grandes emperadores romanos, Trajano y Adriano nacieron en sus tierras. Siendo relevantes personalidades como Columela padre de la agronomía, Séneca el gran filósofo preceptor del emperador Nerón, Quintiliano maestro de la retórica o Marcial extraordinario poeta satírico. También se nos habla de la Hispania romana cristiana, siendo el gran representante San Isidoro de Sevilla, obispo, escritor y Doctor de la Iglesia.

Séneca, gran filósofo hispano romano.

Es siguiente capítulo nos remonta a la España medieval y tardoantigua, con aquellos convulsos siglos de la conquista musulmana y las sucesivas refriegas cristianas que dieron en lo conocido como Reconquista. Aquí se nos habla de una serie de personajes tras los cuales la fina línea de la historia y la leyenda se pierde la bruma del tiempo. Empezando con el patrón de España, Santiago apóstol de Jesús que llegó al fin del mundo para traer la Buena Nueva, siendo también relevante la apariencia de la Virgen al apóstol sobre una columna, tradición de la Virgen del Pilar, patrona de España. Santiago no solo es importante en la historia española por su evangelización y por el Camino de peregrinación que lleva su nombre al santo lugar donde reposan sus restos mortales, si no que la leyenda lo sitúa como una aparición celestial a lomos de un caballo, blandiendo una espada y luchando por la Fe Verdadera en la batalla de Clavijo. Los tros personajes de este capítulo son don Pelayo último rey godo, don Julián el traidor que abrió las puertas a los musulmanes, don Rodrigo rey de los astures y fundador del reino cristiano y Rodrigo Díaz de Vivar, el legendario Cid Campeador, importante personaje tanto histórico como literario.

El Cid Campeador, símbolo del buen guerrero.

El siguiente repasa la España moderna, centrándose en el periodo correspondido en el Siglo de Oro. Una época donde el brillo de una literatura deslumbró la decadencia del poderío del imperio hispánico. Arquetipos literarios que han alcanzado universalidad por su enorme trascendencia. Mitos universales como el loco genial de don Quijote, el pícaro incansable Lázaro de Tormes, la alcahueta intrigante Celestina o el seductor incorregible don Juan. También se nos habla del Al-Ándalus, la Inquisición y la Conquista de América, lugares comunes entre la leyenda negra y la historicidad objetiva.

Don Juan, arquetipo del seductor por antonomasia.

El último que se centra en los mitos nos traslada a la España más contemporánea, con algunos de los mitos que han configurado nuestro concepto moderno de nuestro país. Pasando por la Leyenda Negra y la singularidad de una nación entre dos aguas, entre la fe y la espada, el poder y la corrupción, el afán de progreso y la decadencia constante. Empezando por aquellas hembras singulares, las valerosas mujeres que son complejos se remangan para defender lo suyo, con las serranas del Marqués de Santillana o Agustina de Aragón, heroína de la Guerra de la Independencia contra los franceses. Otra mujer mítica es sin duda Carmen, nacida de la mente del escritor Prospere Merimee e inmortalizada por la música de Bizet, está lozana cigarrera representa al mito de mujer sensual e indómita. También se hablan de los legendarios bandoleros, criminales elevados al mito de la lucha contra el poder y libertad por la literatura y el romancero, los guerrilleros como Juan Martínez el Empecinado, orgulloso invento español y los nacionalismos catalán, gallego y vasco. Y por último se nos habla del mito de las dos Españas, nación cainita y fratricida donde se vierte la sangre entre hermanos, desde las Guerras Carlistas hasta la Guerra Civil, un lugar común del odio entre españoles que bien retrato el genial Goya en una de sus Pinturas Negras. 

Duelo a garrotazos. Imagen 


Para finalizar se nos habla de una fauna mítica ibérica. Criaturas que poblaron el acervo mitológico uniendo esa íntima unión entre los hombres y los animales, desde las primeras cazas hasta la domesticación. Los animales fantásticos siempre has fascinado a todas las culturas, por ese aire mágico e inalcanzable de seres de extraordinario poderío. Criaturas tan fascinantes como los ciervos de astas brillantes, las aves primordiales o el toro como símbolo del poder y al fuerza. Animales tan admirados que ya desde las primeras representaciones artísticas fueron inmortalizados en las cuevas como símbolo de honra y fascinación.

Pintura rupestre en la Cueva de Altamira.

Pequeña historia mítica de España es un ensayo tan único como extraordinario. David Hernández de la Fuente escribe con gran erudición y sencillez en este recorrido mítico histórico por los tipos, arquetipos y figuras que tejieron durante siglos ese cariz de lugar fascinante, maravilloso y único que es nuestra piel de toro. 



David Hernández de la Fuente (1974-)

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